Después de unos años de parón, decidimos retomar el proyecto con este número sobre duelos. Dudamos. "¿Tenemos ganas de embarcarnos en un número que nos hará abrir las heridas, mostrarlas, sostenerlas; observar las cicatrices, acariciarlas, llorarlas?". Con ciertos miedos, decidimos que sí. Por los duelos que no han tenido tiempo ni espacio, por los que no se nombran, por los escondidos, por los silenciados, por los comunes, por los que ni siquiera conocemos, por los enquistados, por nuestro propio duelo como equipo.