Karin Berger recoge el relato de Ceija Stojka sobre su paso por Bergen-Belsen, a donde fue trasladada cuando tenía 11 años, después de pasar por Auschwitz y Ravensbrück. Allí permanecerá con su madre y otros familiares, desde principios de 1945 hata la liberación del campo de concentración, en abril de ese mismo año. Después de mas de medio siglo, una anciana Ceija Stojka recuerda los meses pasados en Bergen-Belsen. Describe la espantosa cotidianidad de la muerte, del hambre, de la violencia y también la voluntad de supervivencia. Las palabras de Ceija Stojka no transmiten odio ni amargura. ¿Cómo han podido tantas personas seguir ciegamente las consignas alucinadas de un hombre? Esta es su pregunta y su perplejidad ante lo vivido.